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Gran casa en venta en La Molina, en la urbanización La Pradera, con un terreno realmente excepcional de 10,656 m², único en el distrito y en la zona. Se trata de una casa-hacienda estilo colonial, que conjuga historia, tradición y amplitud, rodeada de grandes jardines, árboles centenarios, estanques de agua y con límites que alcanzan el cerro, la calle Las Torcazas y el Club Rinconada. Una propiedad de estas dimensiones y características es un verdadero tesoro: un refugio de campo dentro de la ciudad.
Construida hace 71 años, esta residencia se encuentra en muy buen estado de conservación, y al mismo tiempo ofrece la posibilidad de modernizar ciertos ambientes de acuerdo al gusto de sus nuevos propietarios. La arquitectura reutiliza y conserva elementos coloniales auténticos, como los pisos de piedra originales usados como contrapesos en fragatas españolas durante la época de la conquista, y un techo tallado a mano en la sala principal, pieza histórica del Virreinato en Perú.
El ingreso a la propiedad se realiza a través de un portón de carácter, que conduce a un patio de distribución desde donde se accede a la puerta principal, la cocina y el comedor. La puerta principal abre hacia un amplio recibidor, conectado a la sala principal que alberga el techo histórico. Este espacio se vincula con un hall iluminado por ventanales panorámicos en arco, que da acceso a un gran salón comedor con techos altos y al mismo tiempo conecta con las escaleras hacia el segundo piso.
En el primer nivel también encontramos un living familiar con chimenea, integrado a una gran terraza que se abre hacia los jardines, así como dos baños de visita y un estudio acogedor. La cocina, muy amplia y en forma de L, incluye comedor de diario y conecta directamente con la zona de servicio.
En el segundo nivel se distribuyen los 8 dormitorios, de los cuales 3 cuentan con baños incorporados. En total la casa ofrece 6 baños completos, más los dos de visita en la planta baja. El dormitorio principal se distingue por su amplitud, su luminosidad, un walk-in closet y un baño privado con acceso a la terraza y al jardín. Además, el nivel alto alberga una biblioteca con balcón, un espacio ideal para la lectura y el descanso.
La propiedad posee detalles singulares que marcan diferencia: un bar de madera con cava de vinos, ambientes sociales con techos altos y conexión directa al exterior, así como pisos de madera tanto en áreas sociales como privadas. El área exterior es simplemente imponente: una gran piscina con vestidor y baño, rodeada de naturaleza, terrazas techadas y un extenso jardín tipo bosque con dos estanques, áreas verdes y árboles que crean un microclima natural dentro de la propiedad.
La amplitud se refleja también en la capacidad de estacionamiento: la casa dispone de 4 cocheras techadas y un área abierta que permite estacionar 15 autos o más. Esta comodidad se complementa con el carácter residencial exclusivo de La Pradera, una urbanización con control de accesos, videovigilancia y seguridad 24/7.
Lo que convierte a esta propiedad en algo verdaderamente especial es la sensación de estar en el campo dentro de la ciudad. Sus jardines enormes, su vegetación abundante, la topografía en ladera que le otorga vistas panorámicas únicas hacia La Pradera, La Estancia y Rinconada, y el silencio natural que la envuelve, hacen de esta casa una experiencia incomparable. Aquí se puede disfrutar de la tranquilidad de una casa de campo, pero al mismo tiempo gozar de la conveniencia de estar en un punto céntrico y accesible de La Molina.
Zonificación y parámetros
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